Realizada
por el escultor Rafael Tinoco Paniagua entre Mayo y Junio de 1993.
Está hecha en barro cocido y madera, de 60 cm de altura y que ha
sido estofada y policromada.
Tiene
una peana, de madera de caobilla de forma octogonal. Alterna formas
cóncavas y convexas. Sus aristas van flanqueadas con conchas
asimétricas y bolas irregulares entre ambas. Está rematada por una
montaña, simbolizando la cornisa del Aljarafe. Dicha peana va dorada
de pan de oro metal y patinada para darle antigüedad. Es una talla
directa de unos 20 cm de altura por unos 35 cm de diámetro máximo.
La
imagen de la Virgen es de talla reducida, de 40 cm de altura. El
manto va ceñido en sus manos, con la mirada baja y expresión dulce,
va sobre una nube rodeada de ángeles querubines. Todo ello sobre un
castillo simulando a la antigua fortaleza musulmana existente en
nuestro pueblo, Hisn Al-Faray. La imagen va estofada y policromada al
oleo. El manto es de color azul, repleto de estrellas y con relieves
de hojarascas y ángeles que recolectan los símbolos eucarísticos y
otros velan el escudo pontificio. La saya es de color crema con
rayados en pan de oro y con lirios pintados en azul claro, haciendo
alusión a la virginidad de María y rosa patrocinio haciendo alusión
a su pureza. La nube adopta un tono cobrizo y los querubines con alas
de colores alzan sus miradas, uno al cielo, otro a la tierra y el
tercero durmiendo. El castillo va recubierto de pan de oro patinado.
La
corona que lleva la Virgen es de orfebrería realizada en los
talleres Ramos. Es pequeña y realizada en latón cincelado y bañado
en oro. La luna es realizada en alpaca plateada con dos estrellas en
sus extremos y un escudo dorado de la Hermandad en el centro (todo
ello a tamaño reducido).